La obesidad y el pie plano en el niño

La obesidad y el pie plano en el niño

Sólo el 1% de los niños que tienen pies planos necesita dispositivos ortopédicos. En la mayoría de los casos, el problema tendera a corregirse con el crecimiento y desarrollando actividad física. Varios son los estudios que informan, que el pie plano se ve con más frecuencia en los niños pequeños, varones y gorditos.

Los pies planos o arcos caídos son un problema común. En los bebés y niños que están empezando a andar, el arco longitudinal todavía no se ha desarrollado. "Tradicionalmente, se ha tratado con soportes para el arco plantar [plantillas ortopédicas] y zapatos correctivos, pero estudios recientes no han conseguido demostrar la eficacia del tratamiento".

Un artículo publicado recientemente en la revista “Pediatrics” donde los investigadores de la Universidad de Viena (Austria), han estudiado a 835 preescolares (entre tres y seis años) para evaluar los factores que influyen en el problema y el número de tratamientos innecesarios. En torno al 44% de los participantes tenía pies planos, aunque sólo en el 1% se trataba de casos patológicos, es decir, que el pie plano era rígido (al ponerse de puntillas no aparece puente) y causaba dolor. Sin embargo, el 10% de los afectados llevaba dispositivos ortopédicos.

"Los soportes del arco plantar y los zapatos correctivos son incómodos para el pequeño. El tratamiento de los niños con pie plano fisiológico es ineficaz y produce costos enormes para los padres. Los niños con el típico pie plano flexible infantil no deberían ser torturados con estos dispositivos", concluyen los autores, que recuerdan que sus "datos confirman que el pie plano fisiológico mejora de modo natural con la edad".

Un nuevo riesgo de la obesidad

Así, mientras más de la mitad (54%) de los niños de tres años tenía pies planos, apenas la cuarta parte (24%) de los de seis presentaba el problema. Además de la edad, las probabilidades de presentar arcos caídos venían definidas por otros dos factores: el sexo y el peso. "El arco mejora con la edad, muy rápidamente hasta los seis años, algo más lento hasta los 10 y sin cambios significativos a partir de entonces", aclara el trabajo.

El 52% de los niños tenían pies planos, frente al 36% de las niñas. De hecho, el estudio ha visto que el arco se desarrolla de forma más tardía en los varones. También los participantes con kilos de más, presentaban con frecuencia el problema, independientemente de su sexo. En comparación con los voluntarios con un peso normal, los obesos tenían el triple de probabilidades de presentar pies planos. Los autores creen que con estos datos en la mano y teniendo en cuenta la creciente epidemia de obesidad infantil, "podemos suponer que el número de niños con pies planos y su relevancia clínica aumentará en el futuro".